¿Cómo escoger la piedra perfecta para el anillo de compromiso?

Ha llegado el momento de hacer la pregunta a la persona indicada para dar el comienzo al siguiente capítulo de su historia de amor.

El compromiso que se hacen las parejas de acompañarse para siempre comienza con una simple pregunta que se sella con, lo que desde hace años es el símbolo de una promesa de amor eterno, un anillo de compromiso.

La tradición y las costumbres han establecido que los anillos de compromiso sean protagonizados por una de las piedras preciosas más aclamadas y deseadas en el mundo: el diamante. Sin embargo, la historia también nos ha demostrado que el anillo de compromiso puede ser tan único como cada pareja y así, cualquier piedra que la represente, tan especial.

El diamante ha sido el protagonista de la mayoría de anillos de compromiso desde que De Beers Group, una de las compañías diamantes más grandes e influyentes del mundo, lanzó su exitosísima campaña publicitaria “A diamond is forever” en 1947, y aunque desde ese entonces se ha reconocido al diamante como la piedra perfecta para representar un amor fuerte y duradero, no es la única con la que las parejas se comprometen.

Aparte del diamante, las piedras preciosas más comunes en los anillos de compromiso son el zafiro, la esmeralda y el rubí. Cada una de estas piedras representa y simboliza diferentes cosas y las parejas primero deberán decidir cuál de ellas evoca todo lo que su relación e historia de amor significa. 

 El zafiro y su color azul profundo simbolizan la armonía, la tranquilidad y el equilibrio en una relación. Se dice también que ayudan con la comunicación y representan lealtad y sinceridad entre las parejas. El zafiro ha sido la piedra preciosa elegida por la realeza desde hace muchos años y el anillo de compromiso de la princesa Diana y la duquesa de Cambridge Kate Middleton es uno de los más reconocidos con esta piedra.

La esmeralda, piedra verde que comúnmente simboliza a la madre tierra y la naturaleza también es usada en los anillos de compromiso para representar la paciencia, el crecimiento y el futuro de las parejas. Además se cree que la esmeralda promueve la fertilidad y el amor incondicional.

El rubí, por su intenso color rojo es la piedra que representa un amor profundo, intenso y pasional. También es reconocido por ser una piedra que simboliza la fortaleza y una vida amorosa exitosa.

Estas son las tres piedras preciosas más comunes en los anillos de compromiso, luego del diamante. Sin embargo, no hay regla alguna que dicte cuál ni cómo debe ser la piedra para el anillo de compromiso perfecto. También se pueden usar piedras semipreciosas o incluso anillos sin piedra alguna, lo importante es que lo que se elija sea la máxima representación del amor de la pareja.

Luego de haber escogido la piedra indicada, es importante escoger el corte (o la forma) de la misma. En la mayoría de los casos y el corte comúnmente usado para las piedras de anillos de compromiso, es el corte brillante (circular), pero así como la piedra, esto también es una decisión propia y sin importar cuál o cómo sea, la piedra será única y especial para la pareja. Otros de los cortes más comunes son el corte óvalo y el corte pera.

El compromiso es uno de los momentos más significativos en las historias de amor y es el comienzo de la etapa que dictará el futuro de cada pareja. Por eso, es tan importante que la joya que se elija sea la más perfecta representación tanto de la pareja como de su relación y amistad. El primer paso es elegir la piedra y este es solo el comienzo, luego vendrá escoger el diseño del anillo y más adelante, el momento para hacer la anhelada pregunta ¿te quieres casar conmigo?